"Los sacramentos que tenemos en nuestra religión son los que "Dios, Nuestro Creador y Redentor" instituyó para darle al hombre su espíritu y su gracia". Por esto, el Padre, Director de la popular y frecuentada Basílica de Guadalupe, P. Jaime Barrera, cristiano de prodigioso talento, de vasto y profundo conocimiento evangélico, decidió poner orden en el quehacer diario de los políticos concursantes, de la campaña de votación que se acerca. Un debate nocturno fue el evento de la actividad para crear conciencia más positiva, responsable, amistosa y creyente. El líder sacerdotal de la comunidad religiosa estaba seguro de cuanto se hacía dentro de apacible y sereno claustro.
El intelecto es hijo y el verbo de lo uno (Padre). El hijo es imagen de su padre, porque este es inteligible puro, y el hijo es al mismo tiempo inteligible e intelecto, ser y pensamiento, pensado y pensante, objeto y sujeto, como el Dios. Y esto es a semejanza.
El sacerdote es un gran impulsor de la cultura, el creador de proyectos formales a la Iglesia, y de todas las personas que acuden a ella.
El reverendo, por su estilística doctrina, es un valioso teólogo y un asceta de primer orden en la doctrina que enseña. Es un portentoso erudito y gran humanista. Y si a Dios no dirige sus clamores, ¿a quién ha de acudir en su tristeza? ¿A quién ha de acudir en sus dolores?
El padre Jaime en su Eucaristía hace énfasis en el sermón, documento único que Jesucristo dio al hombre para vivir el amor. Él sabe que si amamos, nuestra vida será feliz y con ello se consagró de lleno a su vocación y a velar por los intereses de la Iglesia.
La patria, después de Dios, tiene derecho a que el alma, el aliento y la razón le consagren las mejores y más nobles facultades. Si es la muerte tan temible, por ser fin de las cosas de la vida, "¿qué será por haberse de dar de ella cuenta y razón de todo al tremendo juez inflexible y justísimo que murió en la cruz, que murió porque la usásemos bien? ¿Cit. P. Niuremberg.
Positivos méritos respaldan la brillante personalidad del confesor espiritual de toda muchedumbre católica panameña. Felicidades a los cuatro parlantes del evento político católico.
