"¡Ay, Dios. Volvió a nacer!", exclamaron algunos curiosos al ver cómo quedó atrapada Carolina Solís dentro del Jeep Cherokee negro, con matrícula 624382, que conducía, tras un aparatoso accidente que casi le cuesta la vida.
El vehículo de Solís, de 22 años, quedó bajo las llantas delanteras del bus de la ruta Los Andes-Tumba Muerto, con placa 8B-122 y registro 097299, conducido por Irvin Soto, de 42 años.
El reloj marcaba cerca de las 8: 30 de la mañana de ayer, viernes, cuando Solís salía de los estacionamientos de la Compañía Atlas, en la vía Ricardo J. Alfaro, a la altura del semáforo de Villa de Las Fuentes, cuando supuestamente colisionó al bus cerca de la llanta derecha delantera.
En medio de esa tragedia, además de Solís, quien terminó con un trauma craneal leve, magulladuras y golpes en una mano y pierna, otra mujer-que hasta el cierre de edición no había sido identificada-se mantiene en estado delicado en el Hospital Santo Tomás.
La desconocida, que resultó atropellada en medio de ese accidente, terminó con lesiones craneales severas.
Según el conductor del bus, él esquivaba a unos 5 peatones que cruzaban la calle, cuando le salió de improvisto la conductora de la Cherokee, que se cambió de carril y lo colisionó.
Tanto el conductor del bus como Solís, perdieron el control de sus vehículos terminando uno encima del otro en la isleta que divide los dos paños de la vía.