Tres miembros de la Policía Nacional se encuentran bajo investigación por su oresunta vinculación en la fuga de Javier Enrique Ley Llorente, de 32 años de edad, implicado en el secuestro de los niños David y Alexandra Garrido, hecho ocurrido el 11 de Agosto del 2003.
La evasión del sujeto se dio en horas de la mañana del domingo de Pascua, en el Cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás, donde fue traslado para que recibiera atención médica ante un cuadro asmático.
El sujeto estaba recluido en la cárcel La Joya, pero el sábado presentó problemas respiratorios que provocaron que fuera trasladado a la Policlínica de Chepo, el domingo en la mañana es llevado al Hospital Santo Tomás, donde se evadió aprovechando que uno de los custodios de la Policía Nacional, se dirigió momentáneamente al baño.
Los investigados en la Dirección de Responsabilidad Profesional de la institución son; un cabo, un agente y un sargento de la Policía.
Este no es el primer caso de reclusos que se fugan del Hospital Santo Tomás, durante este año, ya se han presentado cuatro caso de detenidos que han logrado escaparse de este hospital
A principios de este año fue la fuga del capo beliceño, Fernando Requena Duval, de quien aún no se sabe su paradero, ahora fue Javier Ley Llorente, quien también se encuentra prófugo de la justicia.
La Directora del Sistema Penitenciario, Concepción Corro planteó la necesidad de tener más cuidado al momento en que los detenidos van a ser trasladados a centros hospitalarios, para evitar este tipo de situaciones.
Por el secuestro de los hermanitos Garrido, están detenidos Raúl Clarence Lominett, chofer de los niños, al momento del secuestro, Ricardo Eugenio, Rainer Echeverría Camero, Pedro Jaramillo y Ernesto Rook y Javier Ley Llorente, este último prófugo de las autoridades policiales.
El secuestro se dio el lunes 11 de agosto a su salida de un colegio de la localidad, luego fueron liberados tras un intenso operativo policial.