Cala, marca, teje y cose en alta costura, pero lo que más le agrada es ayudar al prójimo, por lo que se encargo de cuidar a un hijo que le fue dado por un amigo y a dos de sus tres hermanos.
Isabel Díaz de Girón, tiene 78 años, lo que no le ha sido obstáculo para estudiar y hacer lo que le ha gustado como forma de entretenimiento y satisfacción para ella y sus familiares.
Isabel, es oriunda de París de Parita, pero se fue a vivir a Aguadulce hace 52 años, incitada por su esposo para poner a estudiar a su hija en la escuela y así estuviera cerca de ellos.
Su negocio fue el hacer pan en su casa dentro de un horno tradicional de ladrillo, cal y cemento durante 25 años, el que era repartido y cobrado por su esposo Amable Girón, desde temprano en las mañana por todo Aguadulce.
Desde las 7: 00 de la noche a la 1: 00 trabajaba haciendo el pan, un empleado, y a las 12: 00 de la media noche hasta las 7: 00 de la mañana hacía el pan la señora Isabel, por lo que dormía hasta las 10: 00 de la mañana para seguir trabajando.
Empezó a estudiar pintura y música en 1990, cuando llegó la Escuela de Bellas Artes a Aguadulce, graduándose en 1999, donde le entregaron el certificado de música y pintura.
Tiene la intención de hacer dos libros cada uno para sus dos hijos en donde quiere dejar plasmadas sus inspiraciones.
En 1990 mientras estudiaba música y pintura se dedicaba adicional al aprendizaje de la repostería, aprendiendo también a hacer flores de tela troqueladas.