Luis Posada Carriles y un grupo de anticastristas cubanos se declararon ayer inocentes, ante el tribunal panameño que comenzó un juicio por su supuesta vinculación a un plan para matar en Panamá al presidente de Cuba, Fidel Castro.
Un informe de la trabajadora social Bernabela Quintana, excluyó al chofer José Hurtado Viveros de estar vinculado en los planes subversivos contra el mandatario cubano.
Este fue definido como un hombre trabajador y tranquilo, pero sigue preso en El Renacer. Viveros compareció ayer junto a Luis Posada Carriles, Guillermo Novo Sampoll, Pedro Crispín Remón y Gaspar Jiménez al primer día de audiencia, donde se leyó el extenso autoencausatorio contra estas personas, bajo la ponencia del Juez Quinto Suplente, José Hoo Justiniani.
El embajador de Venezuela en Panamá, Flavio Granados, reiteró que es necesario extraditar a aquella nación a Luis Posada Carriles, posición rechazada por Rogelio Cruz, defensor de los procesados.
El juicio, que comenzó con dos horas de retraso, prosiguió con la lectura del auto de llamamiento a juicio emitido por el Juez Jorge Enrique Paniza al término de la audiencia preliminar efectuada el pasado mes de septiembre.
