El consumo del alcohol, ha sido reconocido como un factor de integración social y favorecedor de la convivencia. El alcohol es la droga mas empleada por adolescentes.
En un estudio reciente del gobierno federal norteamericano, más del 54% de los niños encuestados había probado alcohol antes de llegar al octavo grado. Los expertos sugieren que los padres cumplen la función más importante a la hora de determinar cómo se enfrentan los niños a la tentación de beber.
Este fenómeno del consumo de alcohol en la juventud en Panamá también preocupa a las autoridades, ya que el aumento de los accidente automovilístico son provocado por los jóvenes en estado de embriagues.
El problema que confrontan los padres de familias es la llegada de los hijos a la adolescencia, donde se le debe educar acerca de lo básico sobre el alcohol y debería conocer sus opiniones e ideas con respecto al abuso de sustancias que crean dependencia. Su objetivo debería ser reforzar lo que le ha enseñado y mantener las vías de comunicación abiertas.
Durante la adolescencia, es más probable que su hijo se comporte de manera arriesgada. Puede que su creciente necesidad-de independencia le haga desafiar los deseos de sus padres como una forma de reafirmar su autonomía. Pero las posibilidades de comunicación positiva con su hijo aumentan si cree que usted acepta o respeta a la persona que es ahora: una persona que quiere gustar y ser aceptada por sus compañeros y que necesita un cierto grado de privacidad y confianza. Usted puede ayudar a mostrarle su respeto evitando los métodos de disciplina como sermones excesivos y amenazas.
La influencia que reciben de sus amigos es fuerte. Los padres debemos reconocer que nuestros hijos tienen que relacionarse con otros adolescentes, pero la comunicación directa con afecto y respeto puede ayudar a que su hijo siga sus consejos sobre las consecuencia del abuso del alcohol. La juventud tiene que defenderse de la terrible plaga del alcohol que azota a la sociedad.