La periodista Nuria Piera es una mujer que a pesar de su trabajo no vive atemorizda. Descubrir los malos manejos de altas personalidades es algo que no la detiene.
La reconocida periodista dominicana confiesa que su trabajo es peligroso, sin embargo, no teme enfrentarse a las situaciones que su profesión le ha traído, pues en su programa "Nuria" ha puesto al descubierto casos de corrupción y estafa por parte de miembros del gobierno dominicano y personajes de la TV como Cristina Saralegui y Walter Mercado.
Nuria ha incursionado en la pantalla chica desde muy pequeña. A la edad de 8 años participa en un programa infantil llamado "El Sherif Marcos". Luego de esto y ya siendo una profesional, entra en el periodismo investigativo.
Mucho se ha hablado de su papel como "paladina" de la justicia al desenmascarar a los corruptos de su país natal, ahora conozcamos un poco a la mujer detrás de este rol.
INCANSABLE
Cuando no está en el programa confiesa que nunca se desconécta, como buena periodista.
"Siempre hay personas que me detienen en la calle para solicitarme ayuda en determinado problema o que investigue algo".
Ella tiene una niña de 4 años y de los ratos que pasa con ella cuenta "que son particularmente especiales, tengo una relación muy buena con ella, eso creo yo". comenta con una sonrisa en su rostro.
TEME POR SU HIJA
Como madre le preocupa la seguridad de su hija, pues en ciertos lugares encuentra personas a las que les ha hecho una investigación en contra. "Intenté inscribirla en un colegio y la directora no me lo permitía. En vista de esto, hice una pequeña indagación y resultó ser que le había hecho una investigación por corrupción a un hermano de la directora. Ahora está en otro colegio en donde tengo tres enemigos y la hija de uno de ellos está con ella en el salón. Ella no puede ni ir al baño sola".
CUANDO NIÑA
Esta periodista, quien asegura ser vegetariana, recuerda que el asesinato de su padre fue un hecho que le cambió la forma de ver la vid.
"Él era periodista y en 1970, cuando yo tenía 7 años, lo asesinaron en un atentado. Mi hermana, mi mamá y yo lo presenciamos todo. Estábamos a la entrada de la casa, esperando a que se abriera la puerta y unos hombres empezaron a disparar.
Mi papá para protegernos, nos tiró al piso y me golpee con la mesa. Él nos cubrió y recibió todas las balas, días después murió".
Con su experiencia y trayectoria hay una lección que no olvida. "La que yo conozco más es la lección que nos dio Jesús.
El amor para todos. Como decía Él, es fácil amar a tu amigo, pero es difícil amar a tu enemigo. Ver que el otro ha fallado, pero es hijo de Dios".