Es probable que los niños que padecen de parálisis cerebral presenten problemas de vista, que simboliza la pérdida del campo de visión y discapacidad del movimiento ocular. La anormalidad resulta en los problemas de concentración visual, es decir para coordinar los ojos, y hasta cierto punto puede afectar las manos. Desde que se observa la afección visual, debe visitarse al especialista regularmente, para que especifique o descarte el uso de un posible tratamiento, lentes, parches o cirujía en el área ocular.
Bien sabemos que todos desean ver con detalles las cosas que nos ha regalado la naturaleza, pero Dios es el que dispone el destino de cada uno. Pero, problemas como la pérdida de acuidad obliga a que las personas vean las cosas nubladas. Un ejemplo de esto es la miopía, en donde la imagen no entra a la retina correctamente, debido a ciertos errores refractivos. Unos lentes pueden ser la opción para aliviar este defecto, ya que este objeto puede mejorar el aprendizaje que surge de la observación, acotó la especialista.
Como mencionaramos anteriormente, tener parálisis cerebral indica que hay otras zonas que pueden verse afectada, y no solo eso, sino que producen ciertas lesiones que quizás usted desconoce, por ejemplo, la hemianopsia, que es la falta del campo visual, bien sea derecho o izquierdo, superior o inferior. Además, la pérdida central, que es similar a como poner un obstáculo redondo frente a los ojos. Por otro lado, la scotoma se caracteriza por una mancha en el campo visual. En el caso de que el infante presente isla de visión, sólo se limitará a ver ciertos puntos separados, y con la seguera periférica, el afectado tiene únicamente la posibilidad de ver hacia el frente.
Todos los que padecen parálisis cerebral, haciendo alusión a los niños, pueden desarrollar problemas de concentración, y más que nada de coordinación (ojo- mano), debido a que ellos utilizan mucha energía y sobre todo concentración para mantener el cuerpo derecho, y controlar los movimientos para agarrar artículos, que casi la energía es nula para dedicarla a tareas visuales.
Además, hay que tener presente que a estos niños no se les puede pedir demasiado, por el contrario como adulto hay que ayudarlo a que estabilice su cuerpo, y se apoye, porque de esta forma podrá concentrarse en lo que mira y quiere agarrar.