¿Puede un hombre saber si una mujer es virgen con solo verla? Imposible. Pues entonces dirán que podrán saberlo cuando tengan relaciones con ellas, adivine qué, tampoco.
La evolución de la sociedad y el liberalismo femenino le han restado importancia a la virginidad, aunque hay para quienes es de suma importancia. Algunos han llegado afirmar que la virginidad es más espiritual que física.
Ningún hombre puede darse cuanta si una mujer no es virgen a simple vista. Para ello debe conocer la anatomía femenina y el panameño promedio no tiene ninguna educación al respecto, aclaró el Dr. Carlos Rolla Font, del Centro Especializado San Fernando.
POCO CONFIABLE
El himen es la membrana que representa “la virginidad vaginal”, pero éste puede ser la salvación de muchas al conocer que existen varios tipos de hímenes y todos tienen una abertura por donde se menstrúa.
El primero en la lista, es el himen elástico o complaciente. Es aquel con el que la mujer puede haber tenido una penetración y no romperse, ya que se amolda al tamaño del miembro y legalmente esta mujer sigue siendo virgen.
También está el himen pequeño que sí se rompe, pero no necesariamente por la relación sexual. Resulta que una mujer puede tener una vida sexual activa y un himen intacto o, por el contrario, que una joven virgen no lo conserve.
El himen puede romperse al montar a caballo, al andar en bicicleta o al realizar un ejercicio brusco, por lo que su ausencia no prueba que la mujer no sea virgen. Después de todo a la hora de mantener relaciones sexuales no es eso lo verdaderamente importante.
Agrega el doctor, que el hecho de que el himen esté presente, no da la certeza de que la joven no haya tenido relaciones sexuales de otro tipo, como la anal o la oral; entonces ¿de qué virginidad estamos hablando?
NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO
El Dr. Rolla dice que el hecho de que al hombre se le dificulte la penetración en la vagina, no significa que la mujer sea virgen. Esto puede ocurrir por falta de lubricación o por enfermedades como el vaginismo, que es una contracción involuntaria de los músculos de la vagina y así el hombre supone que la dama es virgen.
Puede ocurrir que la joven este muy excitada en su primera vez, lo que hace que este bien lubricada y por ello su himen se romperá sin mayores contratiempos, pero su compañero supondrá que no era virgen. Además, no todas las chicas que rompen himen sangran.
El valor de la virginidad se lo da cada persona, para unos es importante para otros no tanto. Algo cierto es que la mujer de hoy ha dejado en segundo y hasta en tercer plano el asunto de la virginidad y ha se ha tomado el derecho a su sexualidad en el momento que lo desee, pero con responsabilidad.
