Las investigaciones que se le siguen al procurador de la Administración, Óscar Ceville, por supuestamente haber realizado escuchas telefónicas, duerme "el sueño eterno" en la Corte Suprema de Justicia.
El procurador José Ayú Prado sostuvo que en razón de que los abogados defensores de Ceville interpusieron un incidente de previo y especial pronunciamiento, se paralizaron las investigaciones.
Ese escándalo salió a la palestra pública después que Jorge Ábrego, un ex seguridad de Ceville, interpusiera una querella en su contra, ya que adujo que realizó un "barrido electrónico" dentro de la Procuraduría de la Administración para escuchar las conversaciones de varios funcionarios de esa institución.
Dentro de las personas a las que se les autorizó grabar las conversaciones, está un magistrado de la Corte Suprema de Justicia.