La Policía española detuvo a ocho personas en las localidades de Ondarroa y Markina, en el País Vasco, norte de España, por su presunta relación con un grupo de apoyo a ETA que perpetraba actos de violencia callejera.
Los ocho detenidos son acusados de haber cometido diversos actos como el ataque con cócteles molotov contra un juzgado y contra diversas entidades bancarias.
Los arrestados tienen edades comprendidas entre los 18 y los 25 años. La Policía ha practicado registros en los domicilios de los detenidos y en distintos locales, en los que halló documentación relacionada con organizaciones ilegales, material informático, teléfonos móviles y material susceptible de ser utilizado como explosivo.
Los detenidos serán trasladados a las dependencias de la Comisaría General de Información en Madrid.
Según la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, la operación forma parte de una amplia estrategia policial y judicial contra el terrorismo callejero en todo el País Vasco.
