La muerte de la menor Marbella García Caballero, quien falleció al momento de realizar ejercicios en el Instituto Rubiano, fue declarado por el Segundo Tribunal de Justicia como un homicidio culposo.
El Segundo Tribunal declinó el conocimiento de ese caso a un Juzgado de Circuito Penal de Panamá en turno.
Marbella falleció el 29 de agosto de 2007, en el plantel.
El protocolo de necropsia determinó una muerte súbita por la presencia de un proceso infeccioso agudo del corazón.
La Fiscalía Segunda Superior estimó que se debía investigar si hubo culpa o falta de cuidado en la aplicación de las medidas de asistencia médica o en el auxilio que debió darse a la menor.
El magistrado ponente Hipólito Gil Suazo consideró que se debe descartar la falta de diligencia para lograr una oportuna atención médica al momento de los hechos por parte de los profesores. Se menciona que la ambulancia no atendió la emergencia y no había personal de enfermería en el Instituto Rubiano.
