Policías mexicanos encontraron ayer en un almacén abandonado de Mexicali, alrededor de medio millón de balas y de distinto calibre sin utilizar, informaron ayer fuentes de la Policía estatal de Baja California.
La operación, que se saldó sin arrestos, se desencadenó en el oeste de la ciudad, gracias a una denuncia anónima recibida por los agentes en la capital de Baja California, estado del noroeste de México fronterizo con California (EE.UU), informó el director de esa corporación, Raúl Florencio Cuevas Salgado.
La munición se encontraba guardada en decenas de sacos y cajas apiladas en un almacén situado en la avenida Camino Nación número 3488, localizada en la colonia Huertas de la Progreso.
Entre lo incautado hay 195.000 balas para rifles de asalto calibre .223, de los conocidos como "AR-15", y 160.000 del calibre 7.62x39, el empleado por los fusiles AK-47, también conocidos como "cuernos de chivo", agregó el mando.
Las demás están repartidas en 135 sacos y corresponden a calibres .357, .380, 10 milímetros, 45, y 38 súper, todos ellos correspondientes a armas de uso exclusivo del Ejército mexicano.
Los cartuchos y balas han quedado bajo custodia de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena).