Un "gato de casa" es el aparente enemigo del Centro Regional Universitario de Colón, donde se cometen constantes hurtos.
Poco a poco se han ido llevando las computadoras que desaparecen como "por arte de magia" y ni los vigilantes se dan cuenta.
En esta semana alguien se dio a la tarea de levantar la puerta del almacén para hurtar otros cuatro equipos de computadoras y nadie se enteró.
Jorge Forte, secretario administrativo de esta primera casa de estudios en Colón, dijo que de repente la cerradura de la puerta no servía y al parecer quien se ha estado llevando las computadoras entró nuevamente al almacén y cargó con otras que habían solicitado.
El docente lamentó que pese a los sacrificios que se hacen, haya quienes no les importa con los equipos de los estudiantes y atenten contra su educación.
Aseguró que el director de esta universidad, Alejandro Salazar, ha interpuesto las denuncias sobre los constantes hurtos, pero no han logrado encontrar al responsable que sigue haciendo de las suyas.
Salazar señaló que como director de este centro tampoco tiene la potestad de despedir a nadie.
Se presume que quien comete esta fechoría tiene acceso a las llaves de las puertas de los salones y departamentos.
Trascendió que hay algunas pistas y solo es cuestión de comprobar.