Mes y medio después de que se destapara el escándalo por la leche adulterada con melamina, 2,390 bebés chinos continúan hospitalizados por haber ingerido este alimento, admitió el Ministerio de Salud chino, citado por los medios oficiales.
Todos ellos presentan problemas renales y uno de ellos continúa en estado grave, destacaron fuentes oficiales, señalando que en la última semana unos 1.200 niños fueron dados de alta.