Solo el correr de las aguas por la quebrada interrumpía el silencio del poeta chiricano Dimas Lidio Pitty, cuando terminó de escribir los últimos cuentos de "La puerta falsa".
Este libro es el ganador del Concurso Nacional de Literatura "Ricardo Miró", sección Cuento. Su autor está satisfecho, porque nuevamente una obra suya alcanza la distinción del más importante premio literario nacional.
Cuarenta y ocho cuentos componen este libro que recoge los trabajos comenzados, tal vez, hace más de veinte años.
Su pueblo natal, Potrerillos Abajo, en el distrito de Dolega, lo ha acogido de nuevo en su seno, después de recorrer los caminos del periodismo y la literatura por más de cuarenta años. Reconocido editor de agencias internacionales de noticias y profesor extraordinario de la Universidad Autónoma de Chiriquí, se considera que no ha dejado de ser un campesino humilde.
Todos estos cuentos que están dentro de "La puerta falsa" son fantasías o ficciones que responden a distintas circunstancias y motivaciones. Pero forman un conjunto unitario, una compilación que el autor ofrece a los lectores del mundo.
El galardón de imprimir el libro por parte del Instituto Nacional de Cultura se anexará a las cinco obras que también han sido premios nacionales.
Aquí no está presente el regionalismo chiricano, ni el folklore, ni tampoco la tendencia costumbrista; más bien estos cuentos muestran la condición humana desde la ciudad hasta la campiña, en los que están presentes los personajes propios de nuestros pueblos.
La cima del imponente volcán Barú, que se observa desde la ventana del estudio del poeta, parece ser parte de la inspiración que hay dentro de "La puerta falsa", porque en la obra se combinan personajes ficticios con hechos reales y al final del cuento terminan fundidos, como partes inseparables de una ficción.
Y, sentado en la sala de su hogar, con una copa de vino tinto, revestida su cara por una barba blanca, bajo el agradable clima de invierno de Potrerillos Abajo, continúa el poeta comentando las intimidades de La puerta falsa.
Destaca que cada uno de los relatos es una muestra de indagación, de preocupación por la situación humana, por la condición y el destino del hombre.
La llamada llegó en el momento menos esperado y era la noticia que nuevamente era el ganador del Concurso Nacional de Literatura Ricardo Miró, sección Cuento. Lo tomó como una muestra de aprecio del azar o de los dioses, pero este galardón para él no tiene el significado trascendente que otros les atribuyen a los premios; más bien es un incentivo para continuar acercándose a aquellos lectores que buscan la oportunidad de viajar en el mundo de la imaginación del autor en cada uno de sus cuentos y vivir esa realidad fantástica y pasajera.
Se trata de un trabajo literario que enorgullece a este autor y su mayor satisfacción y gloria es contribuir al fortalecimiento de la cultura panameña.