CRITICA EN LINEA 

 

S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


primera plana

portada

al cierre

nacional

política

opinión

economía

el pueblo habla

la voz del interior

sport

el mundo

viva

en la cocina

sucesos

 

CRITICA
 
FAMILIA
  OPINI�N


�Lo agobian las preocupaciones?

Romulo Emiliani | Monseñor

Que se esté preocupando por todo y a todas horas; que esté martillando su mente con golpes incesantes de miedos y desgracias que pueden suceder; que su imaginación corra veloz, descontrolada y casi demente, visualizando sucesos que pueden ocurrir y que usted percibe con un realismo tan grande que su cerebro y su sistema nervioso lo experimentan como si estuvieran ocurriendo.

Si a usted le está pasando esto, le decimos: Dios le perdona sus errores si se arrepiente y probablemente mucha gente le perdone también si usted pide perdón, pero su sistema nervioso no perdona. Si usted cultiva la preocupación obsesiva y vive siempre alterado por cosas que están ocurriendo en su imaginación o en la realidad, pero agrandadas al máximo por su yo interior, su sistema nervioso se enfermará y puede ser irreversible el daño.

Y algunos consiguen tantas cosas, pero con úlceras, jaquecas, insomnio o perturbaciones del corazón. �Es esto un triunfo? Creo que no. Claro que hay que luchar por ideales y metas, pero de manera equilibrada poniendo todo en su lugar, manteniendo una jerarquía de valores. Y el triunfo no se mide por las posesiones adquiridas, sino por la realización plena de todo el ser y por haber contribuido a hacer de este mundo, un mundo mejor.

Ustedes valen más que muchas aves y flores. Jesús nos manda a confiar totalmente en nuestro Padre Dios y nos prohíbe las ansiedades excesivas, las que son enfermizas. No quiere que convirtamos nuestra vida en un infierno.

�Sabía usted que es alarmante el número de los que diariamente tratan de suicidarse? Algunos no lo consiguen, pero muchos si. Y es muy probable que en muchos la preocupación enfermiza haya sido la causa que los haya llevado a buscar un fatal desenlace. Una tortura muy antigua consistía en dejar caer una gota de agua sobre la cabeza de la víctima, minuto por minuto. Esto terminaba enloqueciendo a la persona. Eso es la preocupación: una gota de agua que va taladrando su sistema nervioso y termina por hacer de usted un andrajo humano. Jesús no quiere eso para usted. Entréguele a El sus inquietudes y angustias. Dígale que confía totalmente en El y que usted va a luchar por ser mejor y no va a permitir más que la preocupación lo atormente. Y no se olvide que con Dios puede vencer cualquier cosa, porque con El, �usted es invencible!



OTROS TITULARES

Acto de Enrique A. Jiménez

�Lo agobian las preocupaciones?

Estudiante que come, crece

Boletas de Protección

 


 

  





linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2009, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados