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Artesanos obreros ejemplares mal pagados
Aylin Vergara
Cr�tica en L�nea
Mis manos son un par de p�jaros, a veces encadenados, a veces en pleno vuelo. No tienen ojos por s� tienen alma, no tienen patas pero s� levantan el vuelo. Con ellos puedo llegar cerca de Dios y bajar hasta la tierra". As� reza la Oraci�n del Artesano, que recoge el sentir de quien con sus manos, da vida a un sinn�mero de nuevas criaturas, que no se mueven, ni sienten, ni hablan, pero que expresan el calor de un pueblo y que podemos traducir en artesan�as. La artesan�a paname�a comprende muchas manifestaciones de nuestros pueblos interioranos, que a trav�s de los a�os han cultivado esta tradici�n y la han ense�ado de generaci�n en generaci�n, obra que muchas veces no recibe apoyo, ni del gobierno, ni de otros organismos. La se�ora Zedoina de Pitti, tiene 18 a�os de ser artesana. Acompa�ada de sus familiares, Zedoina construye mu�ecos, gusanillos, casitas, nacimientos y otros ornamentos que a pesar de parecer muy sencillos de hacer, tienen que ser trabajados por manos expertas. Chiricana de nacimiento, Zedoina vende sus obras en la ciudad de David, donde dice que "no se gana muy bien", porque no llegan muchos turistas. Una de las manifestaciones m�s hermosas del folclor y el arte aut�ctono de Panam�, es la pollera; un vestido elegante, caro y con todo los detalles que s�lo un trabajo manual, puede hacer. Gladys de Montenegro es oriunda de San Jos� de Las Tablas y tiene m�s de 20 a�os de sombrear, calar y marcar tela de polleras y asegura que su valor puede ir m�s all� de los 1,600 balboas. Feliciano Cruz es verag�ense y tiene 3 a�os de pintar, tallar y moldear churucas, maracas, bateas, totumas y picaflores de madera, que con gran habilidad pudo matizar ante nuestros ojos. Cruz asegura que el gobierno no ayuda al artesano y que su obra, la realiza por "deporte propio". Un artesano ejemplar es el joven Carlos Greco, que a pesar de la malformaci�n de sus manos, confecciona hermosas casitas de madera, peceras y otros trabajos. Greco tiene 21 a�os, es de la capital, pero trabaja vendiendo artesan�as en el mercado de El Valle de Ant�n o en un puesto de buhoner�a y ha aprendido el arte t�pico de ese lugar, a pesar de tener s�lo un a�o de realizar estas labores. El joven artesano dice que hace sus artesan�as por cuenta propia, sin ninguna ayuda institucional. Estos y otros muchos artesanos, mostraron sus productos en la XXII Feria Nacional de Artesan�as, que se llev� a cabo en el Centro de Convenciones ATLAPA y que acogi� a los obreros de las artes, en busca de reconocimiento y de alguna ayuda econ�mica. Es lamentable ver c�mo los ciudadanos extranjeros, se interesan m�s por el arte nacional, que los propios paname�os, quienes se quejan del costo de las artesan�as y no ven la gran labor que deben realizar estos profesionales.
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