El 28 de julio de 1945, Ciencuenta y seis años antes de los atentados del 11 de septiembre de 2001, un avión se etrelló contra el edificio Empire State de Nueva York, matando a 14 personas. La aeronave B-25, en medio de espesa niebla, fue a dar contra los pisos superiores. El accidente no comprometió la integridad estructural del rascacielos, pero aun así dejó más de un millón de dólares en pérdidas materiales.