Una fila de vagones del ferrocarril de la transnacional Chiquita Brands transportaban en agosto de 1963 el banano procedente de las plantaciones en Bocas del Toro.
La compañía explota todavía esas plantaciones en la citada provincia, pero en Chiriquí traspasó esas operaciones a una cooperativa integrada por sus antiguos trabajadores.
La presencia de la compañía de capital norteamericana en tierras panameñas se remonta a mediados de la década del veinte.