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UNA TRADICION POR RESCATAR
Corpus Christi en Penonom�
Irasema Mu�oz
Cocl� / EPASA
Penonom� est� lleno de tradiciones y costumbres y una de las m�s populares es la fiesta del Corpus Christi con los Diablicos Sucios, que a�o tras a�o se han celebrado para la misma �poca, pero que muchos no saben por qu�. El Corpus Christi es la Fiesta del Cuerpo de Cristo, donde el Sant�simo Sacramento se muestra y se eleva en el altar, actividad ideada por una monja de nombre Jualiana de Monst-Cornill�n, de Lieja, B�lgica. Sin embargo, en el medievo se le dio mucha importancia a la Consagraci�n de la Hostia en las misas y era contemplada con veneraci�n por espacio de varios minutos, debido a que se le atribu�an efectos milagrosos al hecho de la contemplaci�n y elevaci�n del Cuerpo de Cristo. Relaci�n de los diablicos con la celebraci�n de Corpus Christi. Cuenta la profesora Marina Arosemena del Grupo Cultural Ra�ces de Penonom�, que antiguamente los diablicos sal�an antes de la celebraci�n de la Misa de Corpus Christi. Los diablicos estaban afuera de la misa "ganando almas" porque los diablicos "mant�os", como se les llama representan los diablicos que nunca se han convertido y siguen en el infierno; por eso es que los muchachos se hacen la se�al de la cruz para que ellos huyan o rezan el Padre Nuestro. Con esta pr�ctica, indica Arosemena, se est� centrando la oraci�n como algo importante para contrarrestar el mal, como se interpreta ahora. Los diablicos mant�os sal�an durante la misa y se ocultaban durante la procesi�n porque el Sant�simo estaba afuera, e inmediatamente que entraba la procesi�n volv�an a salir a ganar almas, ese era el fondo del juego o tradici�n. Desde hace m�s de 60 a�os, como se rememor� en un acto del Grupo Cultural Ra�ces, los diablicos pasean por las calles de Penonom� durante la fiesta de Corpus Christi o como en los �ltimos a�os, s�lo se observa como un juego dentro de algunos planteles escolares que han mantenido m�s o menos viva la tradici�n de los diablicos, s�lo que muchos no saben porque salen o que representan. Es por esto que el Grupo Ra�ces pretende rescatar esta vieja tradici�n penonome�a, que ahora se celebra de distinta manera, a como se celebraba hace 50 a�os atr�s. Cont� el profesor Heraclio Quir�s, que en sus tiempos se visti� de diablico y para este acto trat� de buscar quien lo acompa�ara y tuvo que ir al cementerio porque todos sus contempor�neos que fueron diablicos ya han desaparecido. Indic� que en sus tiempos para cubrirse se colocaban una "ruana", pieza que se hace en cascajal con mantasucia y caucho y pesa much�simo. Adem�s, portaban un garrotillo de cuerda o de cuero con el que obligaban a la gente a arrodillarse y decirles "bendito". Si no lo hac�an eran castigados. Acerca de los "mant�os", indica Quir�s que la palabra correcta es "mantudo" pero como castellanos, se le cortan las letras a algunas palabras y la palabra utilizada hoy es mant�o, que no es m�s que una manta o frazada con un hueco por donde introducir la cabeza y luego se colocaba en la cara una ch�cara para que no vieran qui�n era la persona. Y todo esto iba acompa�ado de chicha fuerte, cuyo gal�n costaba 60 centavos y mucho seco. Pero adem�s, portaban en la boca un pedazo de azufre por si ven�a el aguacero, no se resfriaban, aunque coment� que esto era puro cuento, porque ya iba el seco por delante. Otros optaban por robarse de sus casas la ropa de mujer y con ello se disfrazaban. Cada uno lo hac�a como le daba la gana y se colocaban sus m�scaras o las car�tulas. Hasta romance hubo, seg�n dijo el profesor Quir�s, quien cuenta que hubo una pareja en aquella �poca, que la familia de la novia no quer�a al joven como novio de ella; pero cuando se disfrazaban de diablicos, �l llevaba puesto algo que lo identificara y que ella reconociera, de manera que se pudiera acercar y conversar sobre sus amores, sin despertar sospechas entre la familia. En esos tiempos, tal como ocurre ahora, se colocaban altares con el Cuerpo de Cristo y el Padre pasaba por cada uno, eran 40 aproximadamente, llevando el Sant�simo y santificando cada altar. Hoy s�lo son 6 altares y se dividen por barrios. Anteriormente era en las casas donde se ten�a la posibilidad de confeccionarlo. Los altares se colocan en lugares p�blicos el d�a antes de la fiesta de Corpus o la procesi�n, se mantienen durante la noche y la gente los recorre y se les regala chicha de orchata, que es la bebida tradicional de esta fiesta en Penonom�. Se confecciona con arroz, varias pi�as, clavito de olor, pimienta de olor, canela y hoja de naranjo de lima. Despu�s de la procesi�n, los altares son desmontados.
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