EN LOS ULTIMOS DIAS
Combates con guerrillas deja 5 muertos
y 26 desaparecidos en Murindo, Colombia
Bogotá
EFE
Al menos cinco personas murieron
y otras 26 han desaparecido en los combates registrados en los últimos
días entre paramilitares y guerrilleros en Murindó, al noroeste
de Colombia, indicó ayer hoy una comisión que visitó
esta región selvática para investigar la situación.
Los muertos eran campesinos indígenas del caserío Bartolo,
donde se produjeron los combates desde el pasado 28 de mayo, y los desaparecidos
son aborígenes y negros residentes en la región, señaló
la comisión, formada por cuerpos de socorro y ONG especializadas
en derechos humanos.
Los combates tuvieron lugar en los caseríos de Bartolo, La Isla
y Guaduas, en Murindó, entre el frente José María Córdova
de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y las Autodefensas
Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU).
Según comunicaciones de radio de la guerrilla interceptadas por
el Ejército, podrían ser 41 los muertos, entre ellos 29 subversivos.
Las FARC denunciaron en un comunicado público que se enfrentaron
en esa zona "a patrullas mixtas del Ejército y paramilitares",
y afirmaron que a esas fuerzas les causaron "diez bajas, al menos",
y varios heridos.
El informe de los insurgentes afirma que cinco días después
de los enfrentameintos y "después de una implacable persecución,
el grupo paramilitar, compuesto por unas cien unidades, ha sido prácticamente
diezmado y de él sólo quedan pequeños grupos perdidos
y disgregados en la profunda selva".
La comisión confirmó que en Bartolo los combatientes destruyeron
19 ranchos de indígenas, la escuela y el centro de salud locales.
Los enfrentamientos han obligado, además, al desplazamiento de
unas 600 personas de comunidades negras e indígenas, que se han asentado
en los alrededores de La Isla, indicó la comisión humanitaria.
"Creemos que allá hubo combates, pero a los muertos se los
tragó la tierra o los enterraron quién sabe dónde",
declaró tras las primeras investigaciones un portavoz de la Cruz
Roja Colombiana, integrante también de la comisión.
El jefe de las Fuerzas Militares de Colombia, general Manuel José
Bonett, afirmó que "hasta ahora no ha pasado nada. Se ha registrado
el área, se han buscado cuerpos y aunque cada entidad tiene cifras
de todo tipo, Murindó está totalmente tranquilo. Ahí
no ha pasado nada malo".
"Se ha buscado, pero no se ha encontrado nada", insistió
Bonett, para quien lo único encontrado por la comisión es
"que hay mucha pobreza, abandono e incomunicación en la región",
hasta el punto de que una de las labores principales de los cuerpos de socorro,
además de la búsqueda de cadáveres, es el reparto de
comida en las áreas afectadas por la guerra entre guerrilla y paramilitares.
|
