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ENTRE DESORDENES Y CONFUSION
Comenz� la huelga general en Argentina
Agencias
Internacionales
Trabajadores descontentos con la pol�tica econ�mica del gobierno del presidente Fernando De la R�a paralizaron ayer la actividad en las principales ciudades del pa�s, en lo que signific� una de las huelgas nacionales m�s importantes de los �ltimos a�os. El gobierno reconoci� que el acatamiento a la huelga fue del 60%, en tanto que la Central General de los Trabajadores (CGT), que cuenta con una ala oficial y otra disidente, dijo que fue del 85% en todo el territorio nacional. "Tuvo un acatamiento del 60%, una cifra superior en un 25% o 30% al que alcanz� el paro del 5 de mayo pasado", convocado por la CGT disidente, manifest� el ministro del Interior Federico Storani a la prensa. Adelant� adem�s que la semana pr�xima el gobierno llamar� a una concertaci�n social con los sindicatos, la Iglesia, la industria y otros sectores. Por su parte, De la R�a admiti� el alto acatamiento al paro, pero advirti� que "no contribuye al desarrollo del pa�s". "El paro es amplio, pero desgraciadamente con presi�n y violencia en muchos casos, y con la falta de transporte que constituye un factor adicional". "No se justificaba esta medida y mucho menos la amenaza de seguir paralizando el pa�s, porque no lo vamos a tolerar ni a consentir", se quej�. El l�der de la CGT "disidente" Hugo Moyano pidi� al gobierno que abandone el modelo econ�mico actual. "Los que se creen due�os de la verdad deben dejar de lado la soberbia y no seguir aplicando el modelo econ�mico de hambre, porque el pueblo lo rechaza", reclam� el sindicalista. El alto acatamiento la huelga fue atribuido en gran medida al �xito del paro del transporte, que alcanz� entre el 90% y el 100%, seg�n informaci�n sindical. Cortes de rutas y avenidas, quema de cubiertas, basura desparramada por las calles, ausencia de autobuses y escasez de taxis, negocios con persianas bajas y puertas cerradas, fueron las im�genes que predominaron la jornada. Las oficinas p�blicas permanecieron casi vac�as, al igual que los bancos. Los hospitales garantizaron guardias m�nimas. Taxis y autobuses que transitaban para intentar garantizar el transporte p�blico fueron blanco de piedras y objetos contundentes. Storani dijo que al menos 50 personas fueron detenidas a ra�z de algunos hechos de violencia registrados en diferentes puntos del pa�s. Se trata de la segunda medida de fuerza que debe afrontar el gobierno en seis meses de gesti�n, y la primera que re�ne a los tres sectores del escindido movimiento sindical. Asimismo, el 31 de mayo se realiz� una multitudinaria marcha convocada por el sindicalismo en contra de las "recetas" del Fondo Monetario Internacional. Los sindicatos, cuyos �nimos ya ven�an caldeados, pusieron el grito en el cielo cuando De la R�a anunci� el 29 de mayo un dr�stico plan de ajuste presupuestario por casi mil millones de d�lares. Adem�s, el gobierno redujo en un 12% los salarios de empleados estatales que ganan m�s de mil d�lares mensuales; anunci� el cierre de dependencias oficiales y reducciones en las jubilaciones de quienes tienen menos de 60 a�os. Estas medidas se suman un recorte anterior del gasto p�blico de unos 1.400 millones de d�lares y a un incremento generalizado de impuestos, vigente desde enero.
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