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La ONU se compromete a ayudar a Haití en su transición hacia la democracia "pero este compromiso no puede dar frutos si no es en un clima de reconciliación y de compromiso", declaró Annan. Fotos AP  |
El secretario general de las Naciones Unidas expresó su preocupación de que vuelva la violencia política a Haití, pero destacó que el presidente haitiano desea que la ONU mantenga un representante en Puerto Príncipe.
Desde que Jean-Bertrand Aristide asumió la presidencia por segunda ocasión en febrero, Haití se ha visto azotado por violencia política que ha dejado al menos tres muertos y decenas de heridos.
Las impugnadas elecciones de noviembre que le permitieron a Aristide recuperar el poder fueron denunciadas como fraudulentas por la coalición Convergencia, que aglutina a 15 grupos de oposición, y después de presentar un boicot a los comicios presidenciales, instalaron un denominado gobierno provisional alternativo, encabezado por el educador Gerard Gourgue.
Las exhortaciones de la Organización de Estados Americanos para celebrar otra ronda electoral para varios escaños al Senado que fueron ganados hace seis meses por los candidatos del partido Familia Lavalas, de Aristide, fueron ignorados, por lo que cientos de millones de dólares en muy necesaria ayuda internacional se encuentran retenidos hasta que los resultados legislativos sean revisados.
Annan dijo en su informe sobre Haití que "es lamentable que las diferentes oportunidades que se han tenido para alcanzar un acuerdo" entre los partidos políticos se han desperdiciado, y que "los impedimentos a la reanudación de la muy necesaria ayuda internacional permanecerán en su lugar".
Sin embargo, hizo notar que Aristide pidió a las Naciones Unidas a renovar la instalación de un representante del organismo en Puerto Príncipe.
El último representante de la ONU se fue cuando la misión internacional para Haití se marchó del país en febrero, al concluir su mandato.
"El secretario general recibió una carta del presidente haitiano Aristide el mes pasado, en la que expresa su interés de mantener a un representante del secretario general en Haití con el mandato de facilitar el diálogo entre los diferentes actores políticos y promueva la paz", dijo el portavoz de la ONU, Manuel de Almeida e Silva. No se supo de inmediato si Annan estaría dispuesto a enviar a otro representante.
La comunidad internacional puso fin a su ayuda a Haití, uno de los países más pobres del mundo, para presionar a sus dirigentes. Annan consideró que reanudar la ayuda al desarrollo "podría contribuir a reforzar las tendencias más moderadas" en el seno del partido Lavalas.
El secretario de la ONU subrayó que los opositores a un acuerdo político son "quienes aprovecharon la creciente anarquía de estos últimos años para realizar actividades criminales" que la instauración de un Estado de Derecho volvería difíciles de llevar a cabo. |
