|
Al comprar zapatos las personas toman en cuenta el costo, diseño y color, pero muy pocas veces se fijan en la comodidad que le puede brindar un par de calzados.
Aunque también depende para que ocasión lo necesitan ya que es importante verse bien y vestir acorde a la actividad a realizar.
Se recomienda que al momento de la compra no solo se fije en el número sino que también debe probárselos y caminar con ellos antes de decidir si lo compra o no.
Las medidas de los zapatos varían según el modelo y la marca, además de que, si has caminado mucho, es probable que tus pies estén hinchados.
Como sugerencia para los que quieren estrenar zapatos, deben aplicarle un producto repelente a las manchas o grasa para zapatos.
Se recomienda lijar la suela o frotar contra el piso áspero el zapato nuevo para no resbalar.
Haz tus propias hormas para botas: ata juntos dos o tres tubos de toallas de papel para cocina, o usa envases grandes de refresco o papel periódico enrollado.
Si te aprietan los zapatos, empapa un algodón con alcohol y frota cada zapato por dentro en el punto en que te apriete. Luego póntelos y camina con ellos una media hora.
Se sugiere frotar por dentro con alcohol y ponerles una horma por lo menos durante dos días para aflojar los zapatos apretados, como solución más duradera.
Para las personas que se le desatan constantemente los cordones, humedécelos antes de amarrarlos.
Trate de no uses los mismos zapatos dos días seguidos, debes darles tiempo de recobrar su forma y ventilarse.
En caso de que se les mojen los zapatos, rellénalos con papel periódico y déjalos secar lejos del calor y la luz del sol, cuando estén completamente secos, boléalos.
Se sugiere primero boléalos y luego aplícales una capa delgada de cera para pisos, para proteger los zapatos contra el agua. |
