Teddy Daniels es un agente judicial que se hace con el caso de investigar la desaparición de una paciente peligrosa recluida en un remoto y un tanto terrorífico psiquiátrico situado en una isla de la costa estadounidense. Allí llega junto al nuevo compañero que le es asignado, coinciden con el desencadenamiento de un huracán. Las dos pequeñas notas que encuentra en la habitación de la paciente serán la clave que le pueden llevar a la solución, no solo del caso, también de sus propios fantasmas interiores.
La isla siniestra está bajo la dirección de Martin Scorsese, quien ha dado un giro radical en sus entregas cinematrográficas, se ha apasionado por las narraciones temáticas, pero lo que no se le escapa en ninguno de sus proyectos son sus propias neurosis, miedos, influencias de los rituales familiares y religiosos heredados.