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EDITORIAL
Alerta ante la guerra
Panamá por mantener un Canal Interoceánico debe adoptar medidas de seguridad ante la guerra que se avecina en el Golfo Pérsico. Las autoridades han reforzado las medidas preventivas para neutralizar cualquier amenaza a la vía acuática, pero no hay ser ilusos, frente al terrorismo son pocas las cosas que se pueden hacer. Desde la época en que el Comando Sur mantenía sus tropas en las riberas del Canal, se aceptaba que el Canal era indefendible. Por eso, durante los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, se analizó la posibilidad de construir un Canal a nivel del mar, que en caso de un ataque aéreo, las reparaciones no demoraran mucho y no perjudicara el comercio marítimo y la movilización de tropas.
Es cierto que frente a los avances bélicos, la aviación ha tomado mayor importancia en cualquier guerra, no obstante, el Canal sigue siendo un paso vital para unir al mundo y por ende sigue siendo un blanco potencial.
La excelente seguridad industrial con que cuenta la vía acuática no es suficiente para situaciones de guerra, que requieren aparatos sofisticados y capacidad de reacción rápida ante un eventual ataque. Sin embargo, abrigamos las esperanzas que la guerra no desate y que impere la paz que tanto clama el mundo.
Ya sin dispararse una bala, la guerra está matando las economías de los países pequeños como Panamá, que se ven obligados a pagar precios exagerados por el combustible. Nuestra nación apenas cuenta con un inventario de combustible para 45 días. El petróleo es lo que mueve a la industria y el comercio. Nadie quiere la guerra, pero ésta será peor si se prolonga demasiado.
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PUNTO CRITICO |
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