La ciudad estadounidense de Nueva Orleans cuenta a partir de la fecha con un alcalde blanco, el demócrata Mitch Landrieu, por primera vez en 32 años.
Landrieu, de 49 años, se impuso con más del 50% de los sufragios en la votación celebrada ayer en esa ciudad de mayoría negra y que aún trata de recuperarse de la destrucción dejada por el huracán "Katrina" hace cinco años.
El margen de su victoria frente a otros diez candidatos hizo que fuera proclamado alcalde y se evitara una segunda vuelta. El empresario de raza negra Troy Henry, también demócrata, quedó segundo.
Hasta ahora, Landrieu, que aprovechó en su campaña el descontento sobre la delincuencia y la lentitud en la reconstrucción de la ciudad, era el vicegobernador del estado de Luisiana, donde se encuentra Nueva Orleans.
El nuevo alcalde proviene de una familia de rancio abolengo político en este estado. Su padre, Moon Landrieu, fue el último alcalde blanco de esa misma película hasta ahora, y su hermana, Mary, es senadora demócrata por Luisiana.