Que belleza, bondad, tolerancia, justicia, amor por los animales y por la naturaleza van de la mano; quedó, otra vez, de manifiesto en Cinderella.
Escrita y dirigida por Gabriel Pérez-Matteo (ganador varias veces de los Premios Escena como actor, director y vestuarista), en esta adaptación de Cinderella, nos encontramos no sólo con la bella princesa ambientalista (que protagoniza Karina Pérez, hija de �urea Horta), sino también con un pajecito muy formal y sesudo llamado Gastón (Juan Pablo de Icaza), pero que poco puede hacer para evitar que el Príncipe se enamore a primera vista de una linda extraña, que acompañada de un perro gordito y muy simpático, recoge frutas en el bosque.
Valga decir que Gabriel Pérez Matteo no se concretó en escribir el libreto, también actúa como el padre de Ciderella y se ocupó del diseño y confección de los vestuarios.
Gabriel tiene 20 años en el teatro y debuta como libretista en esta obra, según nos informó Luigi Lescure, quien hace el papel nada más y nada menos que del Rey, el cual, por cierto, tiene bien despierto al niño que cada uno alberga dentro de sí, porque es muy sano, alegre y supergoloso (ya ven por qué está tan barrigoncito), pues le encantan los caramelos y todos los derivados de la glucosa.
Un hada psicodélica (Julina Pérez), como la calificó Lescure, moderna, que le gusta bailar, cantar y que hace énfasis en que "hay que trabajar con lo que se tiene", apela a los coprotagonistas (el perro Rufus, los ratones y la propia Cinderella) y al público, para que ayuden con ideas, aplausos y energía positiva a hacer realidad el sueño de Cinderella de ir al baile que ofrecía el Rey. Insta a seguir tras los sueños y a trabajar en equipo.
Carmen Julia Acevedo, quien es Gunila, la perversa madrastra, comparte escenario con Sara Macías (una gata que se deja conquistar por un perro), Abdiel Tapia (ratón), Sujey Samudio (Federica, la hijastra preferida de Gunila), Ammy Tomlin (ratón), Manuel Paz (Rufus), Bárbara Jay (paloma), Ana Elena Tejera (gata) y Sephany Barrios (Ludovica, la hijastra llorona y dejada de lado por Gunila, pero que en el fondo no es mala como su madre, sino más bien débil de carácter, fácil de persuadir y manipular, y al final se hace amiga de Cinderella.