A ORILLAS DEL RIO LA VILLA
Alberto Rodríguez

Santos Herrera

Alberto Rodríguez Castillo nace en su querido Chitré el 15 de enero de 1925. El viernes pasado cumplió 74 años. Y no obstante ser invidente, tener dificultades para la pronunciación, manos desfiguradas y problemas al andar, a los 23 años se hace músico y compone su primera pieza musical en 1949, intitulada "María Luisa". A ciegas llegaba al antiguo Cuartel de Bomberos de Chitré y debajo de una ventana escuchaba las lecciones que un profesor de música le impartía a los miembros de la banda de esa prestigiosa institución. El distinguido profesor cubano Miguel Alcové, casado con una chitreana, le permitió a Alberto, ya siendo un hombre, que entrara al salón de clases de música, en el Primer Ciclo de Chitré y fue allí donde por primera vez empezó a conocer lo que eran las notas, compaces, medidas y acordes. No tuvo maestro, pero sí mucha constancia y una voluntad férrea que superó todas las dificultades, hasta las impuestas por su propia naturaleza física.

Y este múltiple impedido aprende a ejecutar con maestría y destreza la guitarra, el piano y el órgano. Fue guitarrista en la Estudiantina Sáez y tocó el piano en las orquestas Anayansi, LK, Los Tremendos del Ritmo, Sonora Chitreana y de la Panamericana. Ha sido maestro de más de un centenar de alumnos libres que hoy dominan la guitarra y el arte del canto. Y en varias ocasiones acompañó al piano a ese monumento de la canción popular latinoamericana Daniel Santos y en la guitarra a esa voz romántica de todos los puertos y cantinas del continente, Julio Jaramillo. Como Alberto es un solo corazón, ha participado gratuitamente en todas las actividades benéficas que se han desarrollado en Chitré en los últimos cuarenta años, brindando sus cualidades artísticas y también ha servido con su guitarra y voz, de alcahuete para que corazones enamorados abran sus ventanas al amor, que ilusionado llega en las alas de una serenata en las tibias nochecitas chitreanas.

Otra sobresaliente cualidad de Alberto es su fecunda inspiración que se ha concretado en más de 60 composiciones (tamboreras, cumbias, atravesaos, etc.). Sus creaciones constituyen un culto a la mujer, a la amistad, al trabajo, a la Patria, al terruño. Distintas generaciones las han cantado porque su esencia es de permanencia y hablan de los valores eternos que hacen grande al hombre. Esto se palpa en creaciones como "Chitré", "Eneida", "Tengo un sufrimiento", "Dulce cariñito", "La Mentirosa", "Rufina Alfaro", "Que bella es mi Panamá", "La Independencia (3 de Nov.)", "Limonceñita", "Me voy a Pedasí", "Noris", "Yo me quedo en la Peña", "Griselda", "Mi Virgencita del Consuelo" y su última composición "Sufro y pienso en ti". El gobierno de Endara le suspendió una pequeña pensión que el General Omar Torrijos le concedió, a este humilde hijo del pueblo. Estamos seguros que su hijo Martín Torrijos, de raíces chitreanas, cuando llegue a la Presidencia, le hará justicia al artista Alberto Rodríguez.

 

 

 

 

 



 

AYER GRAFICO
Ferrocarril de Chiriquí cuando recorría todo el occidente del Valle de la Luna


CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo, prosigo con la suciedad


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